¿Conoces al Cristo de Copoya?

Cristo de Chiapas o Cristo de Copoya

El Glorioso Cristo de Chiapas también conocido como Cristo de Copoya es una obra moderna artística monumental. El proyecto, con casi 20 años de preparación, se encuentra en Copoya, Municipio de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, México. La escultura monumental ha sido proyectada en un área territorial de casi 24,000 m2., que cuenta dentro de su perímetro con Vía Crucis o Camino de la Cruz, áreas verdes (vegetación típica de la región), vistas panorámicas a la ciudad capital, área comercial, área de cafetería y restaurante, capilla, mausoleo con criptas, servicios sanitarios, vestíbulo, estacionamiento para más de 300 automóviles, área exterior de usos múltiples, entre otros.

La escultura cuenta con una estructura tridimensional ligera, de barras de acero y nodos conectores (con un total de 50 tons.), cimentación de concreto reforzado (2000 tons. de peso), la Cruz y la figura del Cristo son recubiertas por láminas de acero inoxidable color plata y color oro. El edificio basamento esta cubierto de muros prefabricados de concreto.

La Cruz tiene una altura total de 62 m. (incluyendo el edificio basamento).

El origen de esta magna Obra

La idea original del Cristo de Chiapas fue concebida por Monseñor Felipe Aguirre Franco, entonces Obispo de la Diócesis de Tuxtla (actualmente Arquidiócesis), quien el 23 de noviembre de 1997, durante la culminación del Año de Jesucristo y la celebración de la fiesta de Cristo Rey, promovió su intención de edificar un monumento diocesáno a Jesucristo, como un testimonio visible de la fe, digno y accesible para disfrutarlo, lugar histórico y que identificara a la capital tuxtleca. En un principio se propuso construir un enorme Cristo en la punta del Cerro Mactumatzá al sur de Tuxtla Gutiérrez, sin embargo, la inviabilidad del terreno, la orografía, las antenas de telecomunicaciones y la reserva ecológica, implicaba un alto costo económico, social y ambiental para su construcción.

Respetando el Decreto por el que se declara área natural protegida, con el carácter de reserva estatal las propiedades privadas del ¨Cerro Mactumatza¨ en el Municipio de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, publicadas en el Periódico Oficial No. 032, del 16 de Julio de 1997, y con el beneplácito de las autoridades eclesiásticas, ejidales y municipales (Según minuta de acuerdos expedida y firmada con fecha del 29 de diciembre de 1999) se reubica el proyecto de la Cruz para ser edificada en la Meseta de Copoya, en el Ejido de Copoya, toda vez que cumpliría con las características necesarias, y ¨será una obra para bien de Copoya, de Tuxtla Gutiérrez y del Estado de Chiapas, con la conciencia de que la obra es de beneficio para todos y no de un particular¨.

A finales de 2001 el Obispo Aguirre Franco, propuso se conformara un Patronato que además de encargarse del proyecto y construcción de la magna obra, tendría entre otros fines la recaudación de fondos y realizar las gestiones de apoyo ante las autoridades locales y miembros de la sociedad civil.

Posteriormente en el año 2005 siendo Monseñor Rogelio Cabrera López, Arzobispo de la Diócesis de Tuxtla Gutiérrez, entusiasmado y de la mano de la Sra. María Isabel Aguilera de Sabines y el Ing. Mario Narváez David, coordinan los trabajos protocolarios, entre ellos definir el plan maestro, escultor, gestiones ante autoridades, permisos y trámites legales (estudio de mecanica de suelos, diseño estructural, instalaciones, drenaje, agua potable, luz, licencia de construcción, evaluación de impacto ambiental, supervisión de obra, dictamen de Protección Civil, etc.), conformar el Patronato, entre otros.

La Diócesis de Tuxtla Gutiérrez, realizó los trámites de la solicitud de los terrenos ante el Ayuntamiento, siendo Presidente Municipal Juan Sabines Guerrero, quien bajo la aprobación por unanimidad del cabildo donó en 2005 el terreno de la conocida Meseta de Copoya, en el Ejido de Copoya.

El 4 de mayo del año 2007, con el consentimiento de Monseñor Rogelio Cabrera, Arzobispo de Tuxtla Gutiérrez, se constituye legalmente el Patronato Cristo de Copoya, A.C. (Sin fines de lucro), integrado por 16 personas de reconocida calidad moral en la entidad. El Patronato queda integrado por la Sra. María Isabel Aguilera Aburto de Sabines, como Presidenta Honoraria; Ing. Mario Narváez David, como Presidente Ejecutivo; y como vocales: Obispo José Luis Mendoza Corzo, Don Amin Simán Habib, Lic. Rómulo Farrera Escudero, Lic. Donaciano Martínez Anza, C.P. Felipe de Jesús Granda Pastrana, Lic. Mauricio Penagos Malda, Don Mario Casimiro Vega Román, Ing. Franklin Pedrero Gutiérrez, Lic. Fermín Viaña Ramos, Don Francisco José Roque Castillo, Don Saraín Jiménez Sánchez, Sra. Astrid Beatríz Ravelo Arévalo, Lic. Manuel Francisco Antonio Pariente Gavito, y la Sra. Leticia Elena Pineda Manríquez.

El Patronato se dio a la tarea de buscar a ya no solo escultores sino a arquitectos e ingenieros, para garantizar que el diseño del Cristo, entre ellos se vieron varias propuestas, hasta que el prestigiado Arquitecto Jaime Latapí López, presentó el diseño y propuesta, la cual fue aprobada con gran agrado por la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez y por el Patronato.

Los fondos para la construcción fue producto de eventos de recaudación de fondos (boteo, carreras pedestres, cenas baile, rifa de autos, redondeos, alcancías en las iglesias, centros comerciales, empresas; venta de artículos publicitarios con la imagen del Cristo de Chiapas, publicidad en radio y televisión local, nacional e internacional, entre otros eventos), donativos en efectivo y en especie de la sociedad, así como de empresarios estatales y nacionales. Cabe señalar que no se percibieron recursos del Gobierno toda vez que al tratarse de una obra religiosa no se podían invertir recursos públicos.

Así, el 6 de diciembre de 2011, ante los ojos del mundo, se lleva a cabo la inauguración oficial del Glorioso Cristo de Chiapas, siendo anfitriones el Arzobispo Monseñor Rogelio Cabrera y el Patronato Cristo de Copoya, A.C., contando entre los invitados especiales al entonces Gobernador de Chiapas, Juan Sabines Guerrero, autoridades y miembros de la Iglesia católica, comunidad de Copoya, autoridades estatales y municipales, y comunidad de Tuxtla Gutiérrez.